
¿Qué haré conmigo? ¿Qué estoy haciendo si según lo que estoy diciendo no existe el futuro? ¿Qué estoy haciendo conmigo o qué no estoy haciendo conmigo o sin mí? ¿Puedo hacer algo sin mí? ¿He hecho algo sin mí? Bueno, he caminado conmigo, he ido al baño conmigo, me he bañado conmigo, y al parecer, he soñado conmigo.
Las cosas que he hecho encierran como en una especie de bolsa o maletín, las cosas que he hecho sin mí: como mover un brazo, dirigir la mirada y más adentro: mover los ojos.
Me ha crecido el cabello sin mí, he sentido el aire mientras camino sin mí, he abierto la puerta del baño sin mí, me he lavado sin mí, he movido el brazo de tal manera que forma una suerte de brazo donde al final, o al principio, existe una mano que agarra el jabón y lo pasa por todo mi cuerpo limpiándome.
Sigo siendo algo que no -soy algo que- sigue siendo yo.
¿Qué haré sin mí en un futuro que no existe? Porque mientras el lapicero va dejando la huella de la tinta en la hoja que era blanca, adelante, eso que llaman futuro, se va cubriendo de un color que es presente para que luego la tinta se vaya secando hasta convertirse en pasado.
Entonces: ¿Qué soy conmigo? Y para cuadrar ¿Qué soy sin mí?